(Por Lic. Carolina Naddeo) La sociedad actual y los cambios culturales de las últimas décadas acrecentaron la demanda de tratamientos de reproducción médicamente asistida. Estos tratamientos deben considerarse a partir de un trabajo interdisciplinario entre profesionales, que colaboren en fortalecer la diversidad familiar, fomentar el acceso a la maternidad y paternidad, y garantizar los derechos según el plan de vida elegido. Cuando se trata de gestación subrogada, no hay que ignorar la importancia del acompañamiento psicológico a los comitentes.

Los trastornos adaptativos por ansiedad y trastornos del estado de ánimo son claramente más altos en población infértil que en la población general.

Son pacientes que atraviesan una condición física diferente y un sufrimiento subjetivo relacionado con temas personales y psicológicos.

Concretamente, los tratamientos de reproducción asistida pueden provocar tensión emocional, estados de ansiedad durante el tratamiento y depresión post tratamiento.

Por esta razón, las Técnicas de Reproducción Humana Asistida (TRHA), en particular la gestación por sustitución, requieren de nuevos actores de contención para acompañar las experiencias y las nuevas conformaciones vinculares.

Es fundamental en todo este proceso de gestación por sustitución la participación de un psicólogo o psicóloga que brinde asistencia para atravesar la experiencia no sólo de la sustituta sino también de quienes luego ejercerán la paternidad o maternidad de ese nuevo ser, los comitentes.

De esta manera se realiza un trabajo de integración que va desde las evaluaciones, las vinculaciones, y el entendimiento entre los integrantes hasta el acompañamiento de las transiciones socio-emocionales de los protagonistas.

Guía para la gestación subrogada y el acompañamiento psicológico para comitentes

En el año 2006, la Sociedad Argentina de Medicina Reproductiva (SAMeR) redactó una Guía para la Intervención Psicológica en tratamientos de medicina reproductiva.

Esta guía tiene como objetivo acompañar necesidades puntuales, y si es necesario, asistir regularmente frente a situaciones críticas.

Una vez iniciado el tratamiento médico se irá trabajando en las distintas etapas para proveer información, orientación y guía.

El objetivo de la intervención psicológica es:

  • Colaborar en la toma de decisiones
  • Mantener el estrés dentro de límites tolerables
  • Optimizar la relación con el entorno (familia-amigos-trabajo).
  • Prevenir fallas en la obtención de muestras
  • Realizar procesos de psicoprofilaxis clínica y quirúrgica
  • Atenuar los efectos de la crisis de la infertilidad y temas relacionados a pérdidas.

En definitiva, todas acciones que buscan prevenir el deterioro psicológico a largo plazo.

El rol del psicólogo o psicóloga será brindar apoyo y contención emocional, además de colaborar con la red entre parientes y el entorno.

Gestación subrogada y acompañamiento psicológico para comitentes

La evaluación y acompañamiento o asistencia psicológica a los y las comitentes deberá:

  • Corroborar que la persona tenga plena capacidad para comprender el procedimiento.
  • Abordar los potenciales riesgos psicológicos que puedan obstruir el tratamiento médico.
  • Detectar factores psicopatológicos que puedan obstruir el tratamiento médico y que pudieran ser transmitidos genéticamente.
  • Indagar si dispone de habilidades de afrontamiento y si cuenta con una red de apoyo social adecuado.
  • Conocer cuáles son las motivaciones respecto de la gestación por sustitución.
  • Analizar si sus expectativas respecto del tratamiento son realistas.
  • Pesquisar si la decisión de llevar adelante la gestación por sustitución es aceptada o rechazada por sus lazos afectivos más cercanos.
  • Considerar qué efectos subjetivos produciría el fracaso del tratamiento médico.
  • En caso de que los o las comitentes no fuesen aceptadas se les deberá informar los motivos de exclusión y evaluar el impacto y los efectos que tiene sobre su estado emocional.
  • En caso de que la gestante tenga un vínculo previo con los o las comitentes, la asistencia psicológica servirá para indagar el posible impacto en las futuras relaciones, entre todos los participantes del proyecto parental y trabajar en conjunto durante todo el proceso.

Durante el proceso de evaluación el psicólogo o psicóloga prestará asesoramiento sobre: educación sexual integral, y el valor biológico y simbólico del material genético con fines reproductivos. También posibles destinos de los potenciales embriones, aspectos integrales del tratamiento médico que puedan incidir en su salud integral, y la importancia de firmar el consentimiento.

Este asesoramiento incluye aspectos legales relevantes, en especial el no vínculo jurídico de la gestante con el bebé, explicar sobre la voluntad procreacional.

Las estrategias psicoterapeutas en la gestación por sustitución

El o la profesional podrá intervenir con diversas estrategias psicoterapéuticas para favorecer la transición en las distintas etapas de la gestación por sustitución. Planteará evaluaciones psicológicas antes del inicio del tratamiento con acompañamiento y asistencia psicoterapéutica durante todo el proceso.

Estas evaluaciones están compuestas por entrevistas semidirigidas y tests psicométricos previos al inicio del tratamiento, que se entregarán en formato de informe para que sea considerado como parte del legajo de quienes participen del proceso.

Se propone un mínimo de tres encuentros para la persona comitente y la posibilidad de un encuentro más en caso de ser necesario. En el caso de una pareja de comitentes será un mínimo de cinco encuentros y la posibilidad de un encuentro más.

Las entrevistas psicológicas permiten hacer los tratamientos más personalizados, ya que indagan en las relaciones interpersonales, en la historia y en el contexto socio-familiar. También permiten recorrer la historia reproductiva, el vínculo de la pareja, posibles patologías; y ahondar en la psicoprofilaxis clínica y quirúrgica.

Es por esto que en las sesiones se propone trabajar angustias, miedos y fantasías relacionadas con estas técnicas. También asesorar sobre posibles estados confusionales por desorientación, alteraciones de la memoria, apatía, o irritabilidad.

Es fundamental en esta etapa identificar bloqueos tanto personales o de la pareja para construir el vínculo con la gestante y, a partir del embarazo, ayudar en la construcción y fortalecimiento del vínculo con el futuro bebé.


Licenciada en psicología Carolina Naddeo (MN44880 / MP95145), integrante del gabinete psicológico de Sudamerica Surrogacy.

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