La gestación subrogada, a menudo conocida como maternidad subrogada, útero subrogado o vientre de alquiler, es un proceso reproductivo complejo que requiere de la intervención de distintos profesionales como las clínicas, los abogados, los psicólogos.
La gestación subrogada en un vistazo
La gestación subrogada, también llamada maternidad subrogada, maternidad suplente, vientre de alquiler o vientre sustituto, es una técnica de reproducción asistida por la que una mujer accede a gestar el hijo de otra persona.
A la mujer que dona su capacidad de gestar se le llama gestante o sustituta, aunque también encontraremos otras denominaciones como madre sustituta, madre subrogada, madre de alquiler o madre suplente. A los futuros padres, por su parte, se les denomina padres comitentes o padres intencionales.
Esta técnica consiste en la creación de uno o más embriones mediante fecundación in vitro en un laboratorio y la posterior transferencia de esos embriones al útero de la gestante sustituta.
El embrión será creado por el deseo de los futuros padres. Por ello, en la medida de lo posible, los óvulos y espermatozoides utilizados serán aportados por los padres de intención. En caso contrario, se utilizarán óvulos o semen de donante.
La función de la gestante o mujer sustituta en este tratamiento es gestar y dar a luz al bebé.
Tras el parto, el bebé será entregado a los padres intencionales, es decir, a aquella persona o pareja que manifestó su deseo de tener un hijo y se tramitará lo necesario para que se reconozca la filiación de ese bebé como hijo de los padres intencionales.
Consejos para empezar con buen pie
La primera y gran duda que surge a la mayoría de personas que desean empezar este proceso es por dónde empezar.
Elegir el destino de gestación subrogada
El primer paso es elegir el país donde se realizará el proceso de gestación subrogada. Hay distintos países donde puede realizarse, y cada uno tiene sus propia regulación legal y sus características.
Hay países que sólo permiten la gestación subrogada para matrimonios heterosexuales, otros que lo permiten para todo tipo de familias.
Para ello es fundamental obtener el conocimiento adecuado para poder elegir, y siempre será recomendable asesorarse con abogados expertos en los países de destino y consultores en el tema, para averigüar las condiciones legales del país.
Si necesita alguna recomendación al respecto, puede escribirnos y lo guiaremos en este sentido.
Los primeros pasos
Los padres de intención deben proceder de la siguiente manera:
- Elegir destino: cada país tiene su legislación y sus propias condiciones, por lo que deberá elegirse un destino que se ajuste a la situación de los futuros padres. Si no sabe qué destino elegir, entonces contacte a un abogado primero, que le dará las opciones legales.
- Contratar los servicios de los profesionales necesarios: los padres de intención deberán contratar una clínica de fertilidad y un despacho de abogados en el país elegido.
- Encontrar a la sustituta o gestante: en este punto, Sudamérica Surrogacy puede ayudarlo a encontrar a la sustituta adecuada e idónea.
- Firmar el contrato y la documentación legal legal: los futuros padres y la gestante firman el contrato de gestación subrogada redactado por los abogados, con los términos del acuerdo y la demás documentación legal que los abogados le indiquen, según el país. Es habitual que los padres de intención le otorguen un poder a los abogados para representarlos en caso de necesidad.
- Llevar a cabo el tratamiento de fertilidad: la clínica de reproducción asistida realiza la FIV (fecundación in vitro) y la transferencia de embriones a la gestante. Los óvulos y el semen pueden proceder de donantes o de los mismos padres de intención.
- Realizar trámites de la filiación e inscribir al niño en el Registro Civil: los padres intencionales deben hacer el papeleo necesario para ser reconocidos como padres legales del bebé tanto en el país de nacimiento. Lógicamente los trámites, dependerán del país que se haya elegido y de sus leyes. En algunos casos se realizarán presentaciones judiciales previas, o simultáneas al embarazo, en otros destinos no es necesario ningún trámite judicial.